Con el calor del verano, hay ciertas comidas (y sobre todo frutas) que nos apetecen más que otras. Alimentos refrescantes en los días de más calor pueden ayudarnos a llevar la época estival de una manera más soportable. Uno de los alimentos que cuenta con más fama es, sin duda, el melón.

Ya sea solo como acompañado con un buen jamón, elegir un buen melón requiere de una serie de nociones que no todo el mundo conoce, aun no siendo tan difícil. ¿Cuántas veces hemos comprado un melón que no sabía a nada?

Desde tu restaurante en Torrelodones El Pesca vamos a darte unas pequeñas pautas para que aciertes de pleno a la hora de plantarte en el supermercado y elegir entre todas, la mejor opción. ¡Apúntatelo! ¡No es tan difícil!

¿Cómo elegir un buen melón?

• Cuanto más gordito… mejor.  El melón debe tener un cierto peso, ya que cuento menos pese significará menos carne, menos zumo y tendrá menos sabor.
• Cuida el dibujo. Los trazos de su piel deben tener una continuidad lógica, al igual que el color, que no debe tener cambios drásticos.
• Y la forma… La forma también nos puede dar pistas sobre la calidad el melón que tenemos entre manos. Intenta que la pieza sea lo más simétrica posible. Aunque no tiene necesariamente que significar mala calidad, es un riesgo de que la pieza pueda tener una parte sin el dulzor o propiedades necesarias.
• ¿Melón o melona? No se nos ha ido la olla… Existen melones y melonas y las que se llevan la palma son ellas. ¿Cómo diferenciarlos? La diferenciación entre un tipo y otro viene dada por la forma de la zona contraria al rabillo donde se une el melón a la planta. Si esta es más redondeada y con rayitas formando círculos amplios, hablamos de una melona.
• El grosor de la piel no influye en la calidad y depende del tipo que estemos tratando. No obstante, una buena comprobación trata de presionar con el dedo la parte contraria al rabillo para comprobar cómo está de maduro. Si esa parte no se hunde y permanece muy dura, estará muy verde.

Es importante que tengas en cuenta que no existe una ciencia exacta, y que pueden darse todos los aspectos anteriores y resultar ser una pieza mala, o al revés. Sin embargo, conociendo estas pautas estarás un poco más cerca de acertar con tu elección.

Ahora… ¡a resfrescarse con una buena pieza de fruta!