Los helados, el alcohol,  la comida y cena con los amigos y familias, largas horas en el sofá o menos estrés laboral sumado al calor sofocante hace que en verano se coma mucho más y en algunos casos peor que en otras épocas del año.

Según estudios de expertos engordamos entre una media de tres y cuatro kilos en los meses de verano.

Por todos estos motivos y ahora que se va acercando septiembre, veamos algunos trucos para comer bien después de tantos excesos.

1- Beber dos o tres litros de agua diarios con o sin sed.

2- Combinar en cada una de las comidas proteínas, con un hidrato de carbono y una grasa saludable.

3- Consume cinco o siete piezas de frutas al día.

4- Intentar comer cinco veces al día, tres comidas fuertes y un almuerzo y cena ligeros.

5- Comer legumbres un par de veces por semana.

6- Pescado y marisco comer tres o cuatro veces a la semana y ternera dos.

7- Evitar los alimentos precocinados o muy procesados.

8- Los alimentos en su punto de cocción sin cocinarlos en exceso.

9- Limitar las proteínas magras según si haces deporte o no.

10- Intentar evitar alimentos muy azucarados.

A grandes rasgos son consejos que nos ayudaran a llevar una dieta más saludable y aunque nos cueste llevarlos a cabo en nuestra vida diaria, ser consciente de ello ayuda, de alguna manera, a bajar esos kilos de más que nos pasan factura después del verano y las merecidas vacaciones.